Basílica Catedral Nuestra Señora de las Mercedes

De la Capellanía Castrense de la Guardia de Luján a la Basílica Catedral.

El origen de la Parroquia de nuestra ciudad se remonta, pues, a una Capellanía Castrense, por se la Guardia de Luján una guarnición militar en sus comienzos.

La institución del clero castrense data de 1736 cuando, a instancias de Felipe V, el papa Clemente XII lo estableció con designación de un Capellán mayor o vicario general de los ejércitos españoles, quien delegaba sus facultades en el Obispo de Buenos Aires o su representante; y a ellos correspondía conceder las facultades eclesiásticas una vez que el virrey o el gobernador hacía la designación correspondiente.

El primer capellán de la Guardia de Luján fue el mercedino Fray Hilario Pabón, en 1761.

A partir de 1791, el capellán castrense de la Guardia de Luján ejerció los sagrados ministerios de vicecura de su vecindario, con facultad de administrar todos los sacramentos. Nace así la capellanía vicaria o viceparroquia bajo jurisdicción y curato de la Parroquia de Villa de Luján. La Capellanía Castrense se mantuvo hasta 1812 en que desapareció con la guarnición militar. El último capellán de la Guardia de Luján fue el Pbro. Francisco Silveira.

A fines de 1824 se constituyó la Parroquia, según se desprende de un decreto del superior gobierno, en el que se determina los límites provisionales de la nueva Parroquia. La nueva Parroquia, cuya capilla estaba consagrada desde 1805 a la Virge de las Mercedes, pasó a llamarse por cinco años, “Parroquia de los Angeles Tutelares” o de los “Angeles Custodios”. La advocación a Nuestra Señora de las Mercedes se incorporó definitivamente a partir de 1830.

El 20 de abril de 1934, por bula de Pío Xi, el viejo Templo que se construyó por decisión de Rosas, fue demolido en 1904, siendo párroco el Padre Flores, dando lugar a la erección de la actual Basílica Catedral, inaugurada el 16 de abril de 1921, la Parroquia de Mercedes adquirió la dignidad de Iglesia Catedral, por Bula Papal de 1934.