En el tercer domingo de Cuaresma, el Padre Obispo Jorge Eduardo celebró la Eucaristía en la comunidad parroquial de Sagrado Corazón de Luján, junto al párroco Marcelo Abrey, y los fieles, vecinas y vecinos del barrio y las familias.
En la homilía, el Padre Obispo reflexionó sobre el Evangelio del domingo, expresando que «nuestra vida es pascual, porque siempre estamos muriendo y resucitando. Y con Jesús, muchas veces en la vida, podemos hacer este camino pascual. Entender la vida pascualmente es la clave de los seguidores de Jesús»
«Para nosotros el Maestro es Jesucristo, a Él seguimos y escuchamos y para Él la clave no es la muerte, sino el tiempo de la vida, porque Jesús nos enseña a vivir», animó Mons. Jorge Eduardo e invitó a la comunidad a hacerse las siguientes preguntas.
¿Estás dispuesto a vivir la vida y dar frutos?
¿Qué hacemos con este tiempo de la vida?
Luego de compartir algunas experiencias con la comunidad, el Padre Obispo recordó que «Dios nos ayuda a dar frutos, a que nuestras vidas tengan sentido. Nuestro Dios es el Dios de la vida. El es Amor, cercanía, ternura».
Hacia el final del mensaje, nuestro Padre y Pastor invitó a la comunidad a reconocer que «toda vida es valiosa, toda vida tiene sentido, toda vida es pascual. Y por ello podemos resucitar y dar frutos. Miremos la vida con esperanza».
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